#Fragmento 22 # 16.07.2020# LA ALEGRÍA QUE TE INUNDA CUANDO LLEGA EL BEBÉ ARCOÍRIS
By SOY LA AMATXU - 18:56
No, no estoy embarazada, ojalá, pero no. Sin embargo, hoy quiero hablar de este tema porque me ha dado mucho en que reflexionar. Y es que la alegría que te inunda cuando llega el bebé arcoíris, y a pesar de no ser la única emoción latente, es algo majestuoso.
Desde que murió Ager y, más concretamente, desde que me lié la manta a la cabeza y decidí hacer público este lugar y hablar de la muerte gestacional, siempre desde mi experiencia y desde los testimonios de otras mamás que queréis compartir aquí vuestras experiencias, recibo muchas señas de gratitud de algunas personas a quienes he conocido durante este proceso. Nunca he tenido vocación de psicóloga, no me veo como acompañante de duelo como profesión, pero me gusta escuchar y me gusta comparar impresiones, y siento que de algún modo el legado que me ha dejado mi hijo hace mella en mí y me gusta estar presente, en la medida y tiempo de que dispongo. Sí, confieso que si tuviera más horas libres, las destinaría a escribir más en esta web, a parlotear por instagram y a intentar hacer algo importante que quedase para el futuro. Muchas veces hablamos de duelo, de sufrimiento, de muerte, de rabia, de vacío, que es algo que siempre va a estar para quienes arrastramos en la mochila la muerte de uno o varios hijos. Hoy quiero hablar de vida, de nueva vida.
Como dice mi fisioterapeuta, el movimiento es vida, como las nuevas vidas que crecen en el interior de vosotras, mamás, albergando en vuestros úteros a vuestros bebés arcoíris. Y me emociono, me emociono con todas y cada una de vuestras palabras, con cada foto, con cada ecografía que me enviáis donde aprecio esa vida. Me hacéis sentir grande, me regaláis ilusión por vosotras, como si todos esos bebés fueran mis sobrinos, y yo no dejo de babear y de llorar de amor, por ellos, por vosotras, y sí, en cierto modo también por lo que me gustaría vivir a pesar de las circunstancias. No tengo cabida para el rencor, para la envidia fea e insana, no me sale, no puedo. Mi alma salta de alegría con las vuestras y pienso que ojalá el alma de mi Ager se reencarne en el alma de alguno de esos seres.
Hoy no vamos a entrar en el miedo que acecha en el embarazo arcoíris, no, no, no. Hoy mi aplauso es por vosotras y vosotros, hombres y mujeres que maternamos en el cielo, porque cada hombro parece poco por separado pero todos juntos hacen mucho. Luchamos por no caer en el silencio, porque nuestros hijos nunca caigan en el olvido, por reivindicarles y honrarles, por protocolizar la muerte perinatal-gestacional-neonatal, porque se hable de muerte y no de pérdida, por dar visibilidad al dolor, por coger un altavoz y gritar " yo también soy madre aunque tú no lo veas así ".... A todas, gracias. A mi hijo, gracias, gracias, gracias.
Y hoy mi gracias especial es para María, la amatxu de Enetz. Una supermamá, amiga y compañera de lágrimas y risas a distancia, que ahora ya no sólo llora a Enetz sino que también sonríe a este bebé que ha llegado para darle mucho amor. María lleva diez meses ilustrando su dolor, y ahora ha querido regalar este cuadro al centro donde nos conocimos en una sesión de terapia grupal. Este grupo de duelo se llama "Regazo Vacío" y es gratuito en Centro Maya de Bilbao. Como veis en este cuadro de Marene (su nombre artístico) , tras la tormenta siempre llega la luz. Y así de bonitos lucen María, Enetz y el nuevo bebé.
Gracias, María.
Gracias, Centro Maya.
Eskerrik asko denoi!
Hay quienes se preguntan qué es la sororidad, qué es la resiliencia. Yo les respondo: esto, esto lo es.